¡Hola! ¿Cómo te encuentras? El día de hoy quiero conversar contigo sobre uno de los pilares en la vida de tu pequeño o pequeña. Sí me refiero al lugar en dónde pasa una parte significativa de su tiempo y en dónde no solamente aprende conocimientos teóricos sino que desarrolla gran parte de las habilidades que serán parte fundamental de su crecimiento como persona. Vayamos un poco al pasado. ¿Recuerdas cómo fue tu vida durante el jardín de niños? ¿Cómo era tu maestra? ¿El salón? ¿La hora del recreo? Puedes contestarme que eras muy pequeño y que tal vez no recuerdes tantos detalles. Pero seguramente si puedes recordar si era un lugar agradable o un lugar difícil para ti. Si nos vamos unos años después las preguntas serían casi las mismas pero ya podríamos agregar el si recuerdas ¿Quién fue tu maestra favorita de esa etapa? ¿Qué hacía tan especial a esa maestra? o cómo eran tus compañeritos en el colegio. En este párrafo sí me gustaría compartirte una breve historia sobre esta etapa de mi vida: Si bien es verdad que no recuerdo mucho de esta etapa; si recuerdo a mis maestras y maestros. Usualmente en cada grado tenía una Miss diferente y cada una tenía una personalidad muy particular sin embargo todas compartían la paciencia al enseñar, el gusto por lo que hacían, el respeto hacia los alumnos y padres de familia… cada maestra también tenía su reputación, recuerdo que en 5o grado tuve mucho miedo porque era la maestra más exigente, sin embargo con el paso de los días fui perdiendo ese miedo y aprendí mucho de ella. En 2o grado el método de recompensa era obtener una pequeña gomita al final de la semana por el buen trabajo realizado en clases durante la semana lo cual hoy como adulta es un grato recuerdo de esa miss la cuál siempre fue muy amorosa y dulce; en 4o grado mi maestra de español era la más joven de todas. A lo que voy con todo esto es que las profesoras son pieza clave de la educación y de la formación de tu hijo y que es importante escucharlo para saber qué se siente seguro y que recibe esa educación de una manera amorosa y que este lugar en donde pasa tanto tiempo representa un lugar de seguridad y apoyo para él. En el caso de que tu hijo o hija sean más grandes secundaria o preparatoria los retos serán distintos. En este caso te invito a hacer equipo con los profesores, a escucharlos… Entiendo que tus hijos son lo más valioso en tu vida pero recuerda que en esa etapa requieren límites sanos, que las personas que los rodean influyen en su forma de ver el mundo, que están experimentando y descubriendo su individualidad y personalidad y que no necesariamente lo que les es “injusto” lo sea… En este punto recuerda verificar los valores del colegio, el ambiente escolar por ejemplo: si un valor es el sentido de comunidad seguramente habrá actividades que fomenten este valor, entendiendo que al ser una comunidad la solidaridad y el respeto son fundamentales. Otro punto muy importante es el ambiente escolar que sea un ambiente sano, la mayoría de chicos en esta etapa están propensos a situaciones difíciles y es por ello que si la escuela que elijas tiene un buen ambiente educativo este permitirá que las relaciones de amistad de tus hijos y sus habilidades sociales se desarrollen de una manera armónica y sana. Recuerda que en casa se construyen las bases y en la escuela se refuerzan y el trabajo en equipo es fundamental para generar adultos sanos y emocionalmente responsables. Sin olvidar que esto también son los cimientos para la vida adulta, relaciones laborales, de pareja e inclusive el inicio de grandes sueños que el día de mañana serán grandes realidades.
